The new Power Rangers Los nuevos Power Rangers

The new Power Rangers
Story by Gregg McQueen
Most New Yorkers wouldn’t consider taking the stairs to reach the top of the Empire State Building, but by late August, some uptown summer campers might feel like they’ve done that dozens of times.
At Power Academy summer camps, run by the New York City Mission Society, more than 1,000 children ages five to 13 from Harlem and the Bronx were given pedometers to track their own movements during a seven-week program, designed to inspire kids to become more physically fit.

The goal is for each student to take 7,500 steps during camp every weekday, for a total of 262,500 steps by the end of the summer session on August 21.
That amounts to more than 262 million steps for all Power Academy students collectively ― equivalent to 141,129 strides up the Empire State Building, which has 1,860 steps.

“The Empire State Building has nearly 2,000 steps, and the kids can see that they’ve walked more than triple that in a day,” remarked Elsie McCabe Thompson, President of Mission Society. “It’s really inspiring to them.”
Purchased through a grant from the Laura B. Vogler Foundation, the pedometers are meant to engage urban children in a healthier, more active lifestyle.
“With these pedometers, the kids are not only learning the value of movement, but it encourages them to want to move more,” said McCabe Thompson.
The Mission Society, a Harlem-based nonprofit founded in 1812 to help impoverished New Yorkers, sponsors programs that serve about 13,000 young people each year.
The organization hosts Power Academy summer camps at eight locations in Harlem and the Bronx.
Since taking over as president more than a year ago, McCabe Thompson has made fitness instruction a priority for students in Mission Society’s programs.
“Half of the children in New York City are overweight,” said McCabe Thompson. “And we want to address that, not by shaming them, but by empowering them.”
Power Academy campers were given instructions on how to use the pedometers, while group leaders will assist kids in tabulating their steps throughout the summer.

Genesis Herrera, the Mission Society’s Director of Educational Policy, said that parents of campers have been engaged to help ensure that children remain focused on fitness goals while at home.
“Every camp site had a family workshop, where we discussed the importance of exercise and healthy living,” explained Herrera.
By incorporating pedometers into the learning experience, McCabe Thompson hopes to make exercise more enjoyable for children.
“Making fitness a fun process, that’s something that’s going to have an effect,” she said.
In addition to the pedometer program, this year’s summer camp features a theme of All the Places We’ll Go, based on the Dr. Seuss book.
Campers will take field trips to every borough in New York City, visiting a major landmark in each, such as the Brooklyn Bridge and Wave Hill. The field trips will be incorporated into the fitness curriculum.
Herrera said that the goal is to get kids out of their own zip code.

“Especially with young children, many kids in the Bronx and Harlem have never been outside their neighborhood,” remarked Herrera. “We want them to form their own identity within the city.”
Campers will also learn map skills, and how to find their way around the city, practical lessons meant to help children become more street-savvy.
“Most kids equate learning with school, but to me, learning involves everyday life,” said McCabe Thompson.
For more information on Power Academy summer camps and the New York Mission Society, go to www.nycmissionsociety.org.
Los nuevos Power Rangers
Historia por Gregg McQueen

La mayoría de los neoyorquinos no consideraría subir las escaleras para llegar a la cima del Empire State, pero para finales de agosto, algunos campistas de verano del norte del condado podrían sentir que lo hicieron docenas de veces.
En los campamentos de verano de Power Academy, a cargo de Mission Society de la ciudad de Nueva York, más de 1,000 niños de 5 a 13 años de Harlem y el Bronx recibieron podómetros para rastrear sus movimientos durante un programa de siete semanas diseñado para inspirar a los niños a estar en mejor forma física.
La meta es que cada estudiante dé 7,500 pasos durante el campamento cada día de la semana, para un total de 262,500 pasos al final de la sesión de verano el 21 de agosto.
Eso equivale a más de 262 millones de pasos para todos los estudiantes de Power Academy colectivamente, lo que equivale a 141,129 pasos hasta el Empire State Building, que tiene 1,860 escalones.
“El edificio Empire State cuenta con cerca de 2,000 escalones y los niños pueden ver que caminan más del triple en un día”, remarcó Elsie McCabe Thompson, presidenta de Mission Society. “Es realmente inspirador para ellos”.

Comprados a través de una subvención de la Fundación Laura B. Vogler, los podómetros tienen el propósito de involucrar a los niños urbanos en un estilo de vida más activo y saludable.
“Con estos podómetros los niños no sólo aprenden el valor del movimiento, sino que les anima a moverse más”, dijo McCabe Thompson.
Mission Society, una organización no lucrativa con sede en Harlem y fundada en 1812 para ayudar a los neoyorquinos empobrecidos, patrocina programas que atienden a cerca de 13,000 jóvenes cada año.
La organización acoge los campamentos de verano Power Academy en ocho localidades de Harlem y el Bronx.
Desde que asumió la presidencia hace más de un año, McCabe Thompson ha hecho de las clases de acondicionamiento físico una prioridad para los estudiantes de los programas de Mission Society.
“La mitad de los niños de la ciudad de Nueva York tienen sobrepeso”, dijo McCabe Thompson. “Queremos hacer frente a eso, no avergonzándolos, sino empoderándolos”.

Los campistas de Power Academy recibieron instrucciones sobre cómo utilizar los podómetros y los líderes de grupo ayudarán a los niños a tabular sus pasos durante todo el verano.
Génesis Herrera, directora de políticas educativas de Mission Society, dijo que los padres de los campistas se han comprometido a ayudar a asegurar que los niños sigan concentrados en sus metas de acondicionamiento físico mientras están en casa.
“Cada campamento tuvo un taller familiar en el que se discutió la importancia del ejercicio y la vida sana”, explicó Herrera.
Incorporando podómetros a la experiencia de aprendizaje, McCabe Thompson espera lograr que el ejercicio sea más agradable para los niños.
“Hacer del acondicionamiento físico un proceso divertido va a tener un efecto”, dijo.
Además del programa de podómetros, el campamento de verano de este año ofrece un tema de All the Places We’ll Go, basado en el libro del Dr. Seuss.

Los campistas irán de excursión a cada condado de la ciudad de Nueva York, visitando un hito importante en cada uno, como el puente de Brooklyn y Wave Hill. Las excursiones se incorporarán al plan de estudios de acondicionamiento físico.
Herrera dijo que el objetivo es lograr que los niños salgan de su propio código postal.
“Especialmente con los pequeños, muchos niños del Bronx y Harlem nunca han estado fuera de su barrio”, remarcó Herrera. “Queremos que formen su propia identidad en la ciudad”.
Los campistas también aprenderán habilidades para leer mapas y cómo ubicarse en la ciudad, clases prácticas destinadas a ayudar a los niños a ser más despabilados.
“La mayoría de los niños equiparan el aprendizaje con la escuela, pero para mí, consiste en la vida cotidiana”, dijo McCabe Thompson.
Para más información sobre los campamentos de verano de Power Academy y Mission Society de Nueva York, visite www.nycmissionsociety.org.