No Time to Waste
No hay tiempo que perder

No Time to Waste

By Rep. Adriano Espaillat

The United States is under attack.

As we rapidly approach the 2020 election, foreign adversaries appear determined to sow disinformation and division in our country, undermine our elections, and interfere in our democracy.

Our nation’s intelligence community unanimously determined that, in 2016, the Russian government attacked U.S. elections in “sweeping and systemic fashion” – and they’re continuing to attack us right here, right now. In fact, FBI Director Christopher Wray recently warned that foreign interference in our elections is a “365-day-a-year threat.”

As members of Congress, we have a solemn duty to fight back against these attacks, protect our elections, and defend our country.

House Democrats have already taken decisive action to safeguard our voting systems from foreign interference. As our first order of business, we passed H.R. 1, the For The People Act, to strengthen our democracy and protect our elections. Next, we passed H.R. 2722, the Securing America’s Federal Elections (SAFE) Act, to improve ballot box security in states across the country and modernize our election infrastructure. And this week, we passed H.R. 4617, the Stopping Harmful Interference in Elections for a Lasting Democracy (SHIELD) Act, a bill to crack down on foreign money and influence in our elections.

The SHIELD Act contains commonsense, bipartisan reforms to fight foreign interference and deter foreign activity in our elections. The bill requires campaigns to report foreign offers of assistance to the FBI and closes loopholes that allow foreign nationals and foreign governments to spend money in U.S. elections. It also improves transparency of online political advertisements, prohibits the exchange of non-public campaign information between candidates and foreign agents, and bars deceptive practices and misinformation about voting. Simply put, this bill stops foreign governments, agents, and actors from influencing our electoral process and attacking our democracy.

In his farewell address, President George Washington warned his fellow citizens that, “Against the insidious wiles of foreign influence … a free people ought to be constantly awake, since history and experience prove that foreign influence is one of the most baneful foes of republican government.”

Today, we find ourselves at a moment of grave consequence, staring down this baneful foe. But in the face of foreign attacks on our elections, Republicans have failed to rise to the occasion.

In the House, my Republican colleagues overwhelmingly voted against H.R. 1 and the SAFE Act. And in the Senate, Majority Leader “Moscow Mitch” McConnell has blocked these critical election security bills from receiving an up or down vote on Senate floor.

Sadly, House Republicans once again missed a crucial opportunity to work together with Democrats to honor our sacred oath to the Constitution and keep our country safe when they voted against the SHIELD Act this week.

For years, our nation’s intelligence experts have been sounding the alarm about the grave threat posed by foreign interference in our elections. With the 2020 elections just around the corner, we have no time to waste. Democrats in Congress will continue to take strong action to ensure that America’s elections are decided by Americans – and Americans alone.

First elected to Congress in 2016, Rep. Adriano Espaillat is serving his second term in Congress where he serves as a member of the U.S. House Foreign Affairs Committee, the House Committee on Transportation and Infrastructure, and the House Small Business Committee. Espaillat’s Congressional District includes Harlem, East Harlem, northern Manhattan and the northwest Bronx. For more information, please visit espaillat.house.gov.

No hay tiempo que perder

Por Adriano Espaillat

Estados Unidos está bajo ataque.

A medida que nos acercamos rápidamente a las elecciones de 2020, adversarios extranjeros parecen decididos a sembrar desinformación y división en nuestro país, socavar nuestras elecciones e interferir en nuestra democracia.

La comunidad de inteligencia de nuestra nación determinó por unanimidad que, en 2016, el gobierno ruso atacó las elecciones de Estados Unidos de manera “amplia y sistemática”, y continúa atacándonos aquí y ahora. De hecho, el director del FBI, Christopher Wray, advirtió recientemente que la interferencia extranjera en nuestras elecciones es una “amenaza de 365 días al año”.

Como miembros del Congreso, tenemos el solemne deber de luchar contra estos ataques, proteger nuestras elecciones y defender a nuestro país.

Los demócratas de la Cámara de Representantes ya han tomado medidas decisivas para proteger nuestros sistemas de votación de la interferencia extranjera. Como nuestro primer punto en el orden del día, aprobamos la H.R.1, la Ley For The People (Por el Pueblo), para fortalecer nuestra democracia y proteger nuestras elecciones. Luego, aprobamos la H.R. 2722, la Ley de Seguridad de las Elecciones Federales de los Estados Unidos (SAFE), para mejorar la seguridad en las urnas en los estados de todo el país y modernizar nuestra infraestructura electoral. Y esta semana, aprobamos la H.R. 4617, la Ley para Detener la Interferencia Perjudicial en las Elecciones para una Democracia Duradera (SHIELD), un proyecto de ley que busca tomar medidas enérgicas contra el dinero extranjero y la influencia en nuestras elecciones.

La Ley SHIELD contiene reformas bipartidistas de sentido común para combatir la interferencia extranjera y prevenir la actividad extranjera en nuestras elecciones. El proyecto de ley requiere campañas para informar al FBI sobre ofertas extranjeras de asistencia y cierra las lagunas que permiten a los ciudadanos extranjeros y gobiernos extranjeros gastar dinero en las elecciones estadounidenses. También mejora la transparencia de los anuncios políticos en línea, prohíbe el intercambio de información de campañas no públicas entre candidatos y agentes extranjeros, y prohíbe las prácticas engañosas y la información errónea sobre la votación. En pocas palabras, este proyecto de ley impide que gobiernos, agentes y actores extranjeros influyan en nuestro proceso electoral y ataquen nuestra democracia.

En su discurso de despedida, el presidente George Washington advirtió a sus conciudadanos que “contra las artimañas insidiosas de la influencia extranjera… un pueblo libre debe estar constantemente despierto, ya que la historia y la experiencia demuestran que la influencia extranjera es uno de los enemigos más perniciosos del gobierno republicano”. Hoy, nos encontramos en un momento de grave consecuencia, mirando a este nefasto adversario. Pero ante los ataques extranjeros en nuestras elecciones, los republicanos no han podido estar a la altura de las circunstancias.

En la Cámara, mis colegas republicanos votaron abrumadoramente contra la H.R. 1 y la Ley SAFE. Y en el Senado, el líder de la mayoría “Moscú Mitch” McConnell ha bloqueado estos proyectos de ley cruciales de seguridad electoral para que no recibieran un voto positivo o negativo en el pleno del Senado.

Lamentablemente, los republicanos de la Cámara una vez más perdieron una oportunidad crucial de trabajar junto con los demócratas para honrar nuestro juramento sagrado a la Constitución y mantener a nuestro país seguro cuando votaron en contra de la Ley SHIELD esta semana.

Durante años, los expertos en inteligencia de nuestra nación han estado haciendo sonar la alarma sobre la grave amenaza que representa la interferencia extranjera en nuestras elecciones. Con las elecciones de 2020 a la vuelta de la esquina, no tenemos tiempo que perder. Los demócratas en el Congreso continuarán tomando medidas firmes para garantizar que las elecciones de Estados Unidos sean decididas por los estadounidenses, y solo por los estadounidenses.

Elegido por primera vez al Congreso en 2016, el congresista Adriano Espaillat está cumpliendo su segundo mandato en el Congreso, donde se desempeña como miembro del Comité de Asuntos Exteriores, del Comité de Transporte e Infraestructura, y del Comité de Pequeños Negocios de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos. El Distrito Congresual de Espaillat incluye Harlem, East Harlem, el norte de Manhattan y el noroeste de El Bronx. Para obtener más información sobre el congresista Espaillat, visite espaillat.house.gov.