In Memory of María
En memoria de María

In Memory of María
Champion of Isham Park passes away
By Gregg McQueen

loved nature and loved the community,” said friend Afra Santos.
Photo: G. Lall
María Lall, an Inwood resident who helped create and maintain gardens as a volunteer in Isham Park, has passed away.
Lall, 62, was a familiar face to locals and could often be seen planting flowers, pulling weeds or cleaning up trash throughout the park.
She passed away on August 2 after battling cancer, according to her daughter, Gianna.
Lall’s contributions over two decades as a parks volunteer were indelible.
“People could go in there and find a piece of heaven,” said Afra Santos, a neighbor who frequently assisted Lall with gardening tasks.
“María loved nature and loved the community. She was out there every single day,” Santos said. “She wasn’t looking for recognition, she just did it out of love.”
Lall was perhaps best known for her efforts to rehabilitate a stretch of Isham Park where a pedestrian path connects Broadway with Park Terrace West.
Years ago, the alley was a garbage-filled eyesore. “It was filled with human excrement, trash and drug syringes,” Lall told Manhattan Times during a 2013 interview.

Photo: G. Lall
A volunteer effort spearheaded by Lall completely transformed the space, as she used her own plants to create a flower garden bursting with colors that would attract admirers walking through the park.
Inwood resident Phil Simpson said Lall was “tireless and dedicated” and brought beauty to the neighborhood.
“She transformed waste areas into gardens that have made our neighborhood a far more beautiful place. Especially during the worst days of the pandemic, the flowers brought a lot of relief,” he said.
Following Lall’s death, community members and the Rotary Club of Inwood created memorials to her in Isham Park, using candles, signs and flower arrangements.
“I keep lighting the candles,” Santos said. “Every time I do that, I encounter several people looking at the memorial and commenting about María’s work.”
Lall was frequently seen wearing a hat emblazoned with the slogan “The Power of One,” which served as a personal mantra. To Lall, it described the capacity that a single person possesses to accomplish great things in life.

Photo: G. Lall
“She had a notion that one person can bring about change, and she lived it,” said Santos. “Just look at how she transformed that alley. If not for María, it still might still look the way it used to.”
“María inspired me and taught me that I could do anything,” she said.
An Inwood resident for 45 years, Lall’s creative impulses were also evident at home.
“She liked keeping busy,” said Gianna Lall. “Even in the house, she was always fixing things, always tinkering, updating things, cleaning.”
Over the course of 20 years, it was rare for her mother to skip a day of working in the gardens, Gianna said.
“Although I always supported what she was doing, sometimes I’d be like, ‘Really? Can’t we hold off on the garden just for one day?’ Even on the big holidays, she’d be out there,” Gianna said with a laugh. “But now, I realize just how much her work meant to people. It made them happy, so it was worth it.”
Lall found it more difficult to be in the park as her illness progressed. Near the end, she was still coordinating other volunteers by phone from her hospital bed, her daughter said.
“These last few months, she was worried about it. There was definitely a concern for her about what would happen to her gardens when she was gone,” she said. “I’m hoping that others can pick up and continue her volunteer work.”
As Lall requested prior to her death, her family has launched a GoFundMe campaign to raise money for the purchase of tulips to be planted in the park. As of August 11, the effort had nearly reached its $5,000 goal.

“We hope to also create a memorial to her or plant a tree in her name,” Gianna said.
A church service is planned for August 21 at the Church of Jesus Christ of Latter-day Saints at 1815 Riverside Drive.
“I hope that people learn from my mother that when the community gets involved, good things can happen,” Gianna said. “If every neighbor gave a little bit of their time to keep the parks nicer, imagine how things could be.”
“It doesn’t mean you need to be digging in the dirt. On your walk home, pick up some trash that you see in the park. It could be that simple. There are lots of ways to make a difference,” she said.
According to Santos, community members have discussed creating a petition to name the pedestrian walkway Maria Lall Way as well as staging a park vigil.
“People can say a little something, share a story, honor her memory,” said Santos.
“I’m thinking of how wonderful it will be for María, to feel the love from the community,” she said. “I know she’s still there, in the garden. She will always be there.”
En memoria de María
Fallece la campeona de Isham Park
Por Gregg McQueen

Foto: G. Lall
“Ella siempre estará aquí”
María Lall, una residente de Inwood que ayudó a crear y mantener jardines como voluntaria en Isham Park, falleció.
Lall, de 62 años, era un rostro familiar para los residentes locales y, a menudo, se le podía ver plantando flores, arrancando malas hierbas o limpiando basura en todo el parque.
Falleció el 2 de agosto después de luchar contra el cáncer, de acuerdo con su hija, Gianna.
Las contribuciones de Lall durante dos décadas como voluntaria de parques fueron imborrables.
“La gente podía entrar y encontrar un pedazo de cielo”, dijo Afra Santos, una vecina que frecuentemente ayudaba a Lall con las tareas de jardinería.
“María amaba la naturaleza y a la comunidad. Ella estaba ahí todos los días”, dijo Santos. “Ella no buscaba reconocimiento, simplemente lo hacía por amor”.
Lall fue quizás mejor conocida por sus esfuerzos para rehabilitar un tramo de Isham Park en don un camino peatonal conecta a Broadway con Park Terrace West.
Hace años, el callejón era una monstruosidad llena de basura. “Estaba lleno de excrementos humanos, basura y jeringas de drogas”, dijo Lall al Manhattan Times durante una entrevista en el 2013.

Un esfuerzo voluntario encabezado por Lall transformó por completo el espacio, ya que utilizó sus propias plantas para crear un jardín de flores lleno de colores que atraía a aficionados a caminar por el parque.
Phil Simpson, residente de Inwood, dijo que Lall era “incansable y dedicada” y llevó belleza al vecindario.
“Ella transformó áreas de desechos en jardines que han hecho de nuestro vecindario un lugar mucho más hermoso. Especialmente durante los peores días de la pandemia, las flores trajeron mucho alivio”, dijo.
Después de la muerte de Lall, miembros de la comunidad y el Club Rotario de Inwood llevaron a cabo memoriales en su honor en Isham Park, utilizando velas, carteles y arreglos florales.
“Sigo encendiendo las velas”, dijo Santos. “Cada vez que hago eso, me encuentro con varias personas observando el memorial y comentando sobre la labor de María”.
Lall era vista con frecuencia con un sombrero adornado con el lema “El poder de uno”, que servía como mantra personal. Para Lall, este describía la capacidad que posee una sola persona para lograr grandes cosas en la vida.

Foto: G. Lall
“Tenía la noción de que una persona puede generar un cambio y lo personificó”, dijo Santos. “Solo mira cómo transformó ese callejón. Si no fuera por María, probablemente aún luciría como antes”.
“María me inspiró y me enseñó que podía hacer cualquier cosa”, dijo.
Residente de Inwood durante 45 años, los impulsos creativos de Lall también fueron evidentes en su hogar.
“Le gustaba mantenerse ocupada”, dijo Gianna Lall. “Incluso en la casa, ella siempre estaba arreglando cosas, siempre retocando, modernizando cosas, limpiando”.
En el transcurso de 20 años, era raro que su madre se saltara un día de trabajo en los jardines, dijo Gianna.
“Aunque siempre apoyé lo que hacía, a veces le decía: ¿en serio? ¿no podemos postergar el jardín solo por un día? Incluso en las fiestas importantes, ella estaba ahí”, dijo Gianna riendo. “Pero ahora me doy cuenta de cuánto significó su labor para la gente. Los hizo felices, así que valió la pena”.
A Lall le resultaba más difícil estar en el parque a medida que avanzaba su enfermedad. Cerca del final, aún coordinaba a otros voluntarios por teléfono desde su cama de hospital, explicó su hija.
“Estos últimos meses, a ella le preocupaba eso. Definitivamente era una preocupación para ella lo que sucedería con sus jardines cuando ya no estuviera”, comentó. “Espero que otros puedan retomar y continuar con su trabajo voluntario”.
Como Lall solicitó antes de su muerte, su familia lanzó una campaña GoFundMe para recaudar fondos para comprar tulipanes que se plantarán en el parque. Al 11 de agosto, el esfuerzo casi había alcanzado su meta de $5,000 dólares.

“También esperamos crear un memorial para ella o plantar un árbol en su nombre”, dijo Gianna.
Está previsto un servicio religioso para el 21 de agosto en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en el No. 1815 de Riverside Drive.
“Espero que la gente aprenda de mi madre que cuando la comunidad se involucra, pueden suceder cosas buenas”, dijo Gianna. “Si todos los vecinos dieran un poco de su tiempo para mantener los parques más bonitos, imagínense cómo podrían ser las cosas”.
“No significa que tengas que cavar la tierra. De camino a casa, recoge la basura que veas en el parque. Podría ser así de simple. Hay muchas formas de hacer una diferencia”, dijo.
Según Santos, los miembros de la comunidad han discutido la creación de una petición para nombrar el sendero peatonal María Lall Way y organizar una vigilia en el parque.
“La gente puede decir algo, compartir una historia, honrar su memoria”, dijo Santos.
“Estoy pensando en lo maravilloso que será para María sentir el amor de la comunidad”, dijo. “Sé que ella todavía está ahí, en el jardín. Ella siempre estará ahí”.