City breaks ground on new public health lab in Harlem
La ciudad pone la primera piedra de un nuevo laboratorio de salud pública en Harlem

City breaks ground on new public health lab in Harlem
The new 10-story, 240,000-square-foot building will be located on 137th Street across from Harlem Hospital. Operated by the city’s Health Department, the facility is designed to keep New York at the forefront of disease response and investigation.
Construction of the $454 million project is being managed by the New York City Economic Development Corporation (NYCEDC).


Established in 1892, the laboratory was the world’s first municipal bacteriological laboratory and has helped the city’s response to disease outbreaks including diphtheria, Ebola, Legionnaires, Covid-19, and monkeypox. More than 200 staff members now also provide laboratory testing services, whole genome sequencing, and wastewater pathogen monitoring.

“The New York City PHL is the greatest public health lab in the world and, throughout our city’s history, the scientists who work there have heroically responded to health emergencies, infectious diseases, and are a pillar of disease prevention and surveillance,” said Health Commissioner Dr. Ashwin Vasan. “This vital piece of public health infrastructure demands better physical infrastructure, which this state-of-the art laboratory complex will have. We’re proud that PHL will be an embodiment of New York City as the public health capital of the world and will lead in innovation and training the next generation of public health laboratory scientists.”

The new lab is slated to open in 2026.
For more, please visit edc.nyc.
La ciudad pone la primera piedra de un nuevo laboratorio de salud pública en Harlem

El pasado miércoles 6 de julio se celebró la ceremonia de colocación de la primera piedra de la nueva sede del Laboratorio de Salud Pública de Nueva York (PHL, por sus siglas en inglés).
El nuevo edificio de 10 plantas y 240,000 pies cuadrados estará situado en la calle 137, frente al Hospital de Harlem. Este centro, dirigido por el Departamento de Salud de la ciudad, está diseñado para mantener a Nueva York a la vanguardia de la investigación y la respuesta a las enfermedades.
La construcción de este proyecto de $454 millones de dólares está siendo gestionada por la Corporación de Desarrollo Económico de la ciudad de Nueva York (NYCEDC, por sus siglas en inglés).

“Estamos trabajando para asegurar que nuestros mejores y más brillantes científicos tengan las instalaciones de vanguardia que necesitan y merecen para continuar con sus esfuerzos innovadores y de salvamento en nombre de nuestra ciudad”, dijo el presidente y director general de NYCEDC, Andrew Kimball. “Durante la pandemia, nuestros científicos identificaron kits de pruebas defectuosos, desarrollaron otros nuevos y nunca cejaron en sus esfuerzos por rastrear la Covid-19 u otros virus. Este nuevo laboratorio les ofrecerá las herramientas y los recursos necesarios para identificar futuras amenazas para la salud, mientras que la nueva ubicación del laboratorio beneficiará a la equidad de la salud pública, que nunca ha sido más vital”.

Creado en 1892, fue el primer laboratorio bacteriológico municipal del mundo y ha contribuido a la respuesta de la ciudad a brotes de enfermedades como la difteria, el ébola, la enfermedad del legionario, la Covid-19 y la viruela del mono. En la actualidad, más de 200 empleados prestan también servicios de análisis de laboratorio, secuencia del genoma completo y control de patógenos en las aguas residuales.
El laboratorio tiene su sede en el 455 de la primera avenida, en el East Side, desde la década de 1960.

“El PHL de la ciudad de Nueva York es el más grande laboratorio de salud pública del mundo y, a lo largo de la historia de nuestra ciudad, los científicos que trabajan en él han respondido heroicamente a las emergencias sanitarias y a las enfermedades infecciosas, y son un pilar de la prevención y la vigilancia de las enfermedades”, dijo el Dr. Ashwin Vasan, comisionado de Salud. “Esta pieza vital de la infraestructura de salud pública exige una mejor infraestructura física, que tendrá este complejo de laboratorios de última generación. Estamos orgullosos de que PHL sea una encarnación de la ciudad de Nueva York como capital mundial de la salud pública, y que lidere la innovación y la formación de la próxima generación de científicos de laboratorio de salud pública”.

El Departamento de Salud y la NYCEDC obtuvieron 25 millones de dólares del Departamento de Servicios Administrativos de la ciudad para ayudar a convertir el nuevo laboratorio en uno de los más eficientes en términos energéticos y de alta tecnología del país. El nuevo edificio incluirá paneles solares fotovoltaicos y sistemas de vigas frías, así como una planta de cogeneración que proporcionará un importante ahorro energético y económico.
Está previsto que el nuevo laboratorio abra sus puertas en 2026.
Para más información, por favor visite edc.nyc.