
Best Medicine Matters
By Kathleen M. Pike
Research in neuropsychiatry is uncovering what happens in the brain to explain what we all know intuitively – laughter feels good. It really does have the potential to improve our mental health. How?
1. Laughter stimulates the pleasure center of the brain. Neuroimaging studies shed light on the regions of the brain that process laughter and humor. Laughter engages a network of subcortical regions, including the nucleus accumbens, a key component of the reward system in the brain. Laughter, particularly ticklish laughter, also activates the insular cortex,a brain region crucial for the experience of emotions. In fact, humor has similar effects on the brain as cocaine, seeing a pretty face, and joyful celebrations.
2. Laughter helps us form social bonds. What words or images do we use to describe the sound of laughter? “Haha”, “LOL”, perhaps a wide-grinned emoji with a tear? However you write it, the actual sound of laughter has real impact on our emotional state and the experience of connection. The brain responds to laughter with the same positive effects as when primates engage in grooming each other – leading some to say that laughter is like virtual “grooming.” Affection and bonding are shared by the sounds of laughter. Laughter is also an efficient tool for solving problems in groups. It builds trust, breaks down barriers, and promotes teamwork.

3. Laughter relieves pain. Like exercise, laughing has the effect of releasing endorphins that improve our ability to ignore pain and increase our pain threshold.Also like exercise, laughter increases heart rate, contributing to cardiovascular health. And it isn’t just spontaneous laughter that’s good for the heart. Even simulated laughter that increases heart rate has cardiac benefits.
4. Laughter promotes learning. Humor attracts and sustains attention and makes the learning process more enjoyable and memorable. Laughter in the classroom can help improve learning by reducing anxiety, enhancing participation, and increasing motivation to learn. On a biological level, laughter stimulates the brain areas that activate emotions. The more emotion an activity elicits, the more intensely we remember the details, and the more likely we are to remember the experience.

5. Laughter reduces stress.Laughter decreases stress hormones like cortisol and epinephrine. Even smiling, spontaneous or intentional, can help to reduce stress. Laughter yoga classes are based on the principle of intentional ‘fake’ laughter, which has the infectious power to convert to organic and real laughter. In fact, a study of seventy women in Tehran with depression found laughter yoga to be just as effective as group exercise in reducing depression scores. When we laugh, we experience increases in lymphatic circulation, positive regulation of cortisol levels and improved production of infection-fighting antibodies. It is remarkable that even when we are in stressful situations and not really laughing, if we manage to “grin and bear it,” our brains and bodies respond with improved cardiovascular and stress states.
Laughter really is good for our mental health. No joke!
Kathleen M. Pike, PhD is Professor of Psychology and Director of the Global Mental Health Program at the Columbia University Medical Center (CUMC). For more information, please visit cugmhp.org or call 646.774.5308.
La mejor medicina, importa
Por Kathleen M. Pike
La investigación en neuropsiquiatría está descubriendo lo que sucede en el cerebro para explicar lo que todos sabemos intuitivamente: la risa se siente bien. Realmente tiene el potencial de mejorar nuestra salud mental. ¿Cómo?
1. La risa estimula el centro de placer del cerebro. Los estudios de neuro-imagen arrojan luz sobre las regiones del cerebro que procesan la risa y el humor. La risa involucra una red de regiones subcorticales, incluido el núcleo accumbens, un componente clave del sistema de recompensa en el cerebro. La risa, particularmente la risa cosquilleante, también activa la corteza insular, una región del cerebro crucial para la experiencia de las emociones. De hecho, el humor tiene efectos similares en el cerebro como la cocaína, una cara bonita y celebraciones alegres.
2. La risa nos ayuda a formar lazos sociales. ¿Qué palabras o imágenes usamos para describir el sonido de la risa? “Haha”, “LOL”, ¿quizás un emoji con una amplia sonrisa y una lágrima? Sin importar cómo lo escriba, el sonido real de la risa tiene un impacto real en nuestro estado emocional y la experiencia de la conexión. El cerebro responde a la risa con los mismos efectos positivos que cuando los primates se acicalan mutuamente, lo que lleva a algunos a decir que la risa es como un “acicalamiento” virtual. El afecto y la unión son compartidos por los sonidos de la risa. La risa también es una herramienta eficiente para resolver problemas en grupos. Crea confianza, rompe barreras, y promueve el trabajo en equipo.
3. La risa alivia el dolor. Al igual que el ejercicio, la risa tiene el efecto de liberar endorfinas que mejoran nuestra capacidad de ignorar el dolor y aumentar nuestro umbral del dolor.También como el ejercicio, la risa aumenta la frecuencia cardíaca y contribuye a la salud cardiovascular. Y no es solo la risa espontánea lo que es bueno para el corazón, incluso la risa simulada que aumenta la frecuencia cardíaca tiene beneficios cardíacos.
4. La risa promueve el aprendizaje. El humor atrae y mantiene la atención y hace que el proceso de aprendizaje sea más agradable y memorable. La risa en el aula puede ayudar a mejorar el aprendizaje reduciendo la ansiedad, mejorando la participación y aumentando la motivación para aprender. A un nivel biológico, la risa estimula las áreas del cerebro que activan las emociones. Cuanta más emoción provoque una actividad, más intensamente recordaremos los detalles, y más probable es que recordemos la experiencia.

5. La risa reduce el estrés.La risa disminuye las hormonas del estrés como el cortisol y la epinefrina. Incluso sonreír, espontánea o intencionalmente, puede ayudar a reducir el estrés. Las clases de yoga de risa se basan en el principio de la risa “falsa” intencional, que tiene el poder infeccioso de convertirse en risa orgánica y real. De hecho, un estudio de setenta mujeres en Teherán con depresión encontró que el yoga de risa es tan efectivo como el ejercicio grupal para reducir los puntajes de depresión. Cuando nos reímos, experimentamos un aumento de la circulación linfática, una regulación positiva de los niveles de cortisol y una mejor producción de anticuerpos que combaten las infecciones. Es notable que incluso cuando estamos en situaciones estresantes y no nos reímos realmente, si logramos “sonreír y aguantar”, nuestros cerebros y cuerpos responden con estados cardiovasculares y de estrés mejorados.
La risa realmente es buena para nuestra salud mental. ¡No es broma!
Kathleen M. Pike, PhD, es profesora de psicología y directora del Programa Global de Salud Mental del Centro Médico de la Universidad Columbia (CUMC, por sus siglas en inglés). Para más información, por favor visite cugmhp.org o llame al 646.774.5308.