A Talk with Thompson Una plática con Thompson
A Talk with Thompson
Story and photos by Mónica Barnkow
A year ago, the Brooklyn District Attorney’s office announced that it would not pursue low-level drug arrests.
Specifically, it would not prosecute people arrested for allegedly having less than 25 grams of marijuana.

While the city’s four other districts attorneys also allow charges against alleged offenders to be dismissed, those plea deal typically occur for first-time offenders who keep out of trouble for a short time. As such, at least one court experience is required, and the process can take months.
In contrast, the Brooklyn, the dismissals are made either while the alleged offenders are still in police custody or before the court date.

This past Thurs., Jul.9th, the Brooklyn DA discussed this policy and others initiated under his tenure at the CUNY Graduate School of Journalism.
His visit, organized jointly by the Center for Community and Ethnic Media (CCEM) at CUNY Graduate School of Journalism and the Office of the Brooklyn District Attorney, was the second installment of “Newsmakers 2015,” a roundtable series with CCEM members and elected officials, stakeholders and leaders as funded by the Revson Foundation.
In 2013, Thompson defeated the long-standing incumbent Charles Hynes, who had served for 23 years.
Thompson, who is the borough’s first African-American district attorney, offered an overview of his work to date as its top prosecutor, highlighted forthcoming priorities, and spoke to the national climate on criminal justice reform and policing.
The discussion was moderated by veteran journalist and NY1 Inside City Hall host Errol Louis, together with journalists Aleksandra Slabisz, of Nowy Dziennik, and David Mark Greaves, of Our Time Press.
In his remarks, Thompson said that the DA’s office’s focus, above all, is to maintain public safety.
“The main priority is to prevent crime,” said Thompson, whose office is the country’s third largest district attorney office, after Los Angeles and Chicago.
To this end, the office has formed a Real Estate Fraud Unit to criminally prosecute landlords who engage in duplicitous or fraudulent practices, tenant harassment, or unlawful evictions.
“We are no longer going to let these landlord/tenant issues linger in housing court,” he said, noting that tenants’ complaints against landlords have risen in his borough.

Thompson specifically referred to a case in which two landlords (who were also brothers), under the pretense of making housing repairs, ripped out units and rendered the buildings uninhabitable for tenants.
Among the victims, he said, were mothers with young children.
“I want to make sure that our criminal justice system is fair to us all,” said Thompson.

He cited the work of the office’s Immigrant Fraud Unit in preventing and prosecuting crimes such as green card scams and wage theft. The office holds information forums directly with residents; a recent meeting in Crown Heights was attended by over 200 people.
“We have to do more to protect immigrant communities,” said Thompson, warning against those who pose as lawyers, experts and employers (sometimes referred to as “notarios”) and who take advantage of the undocumented.
“Often these crimes are committed in the workplace,” he remarked.
Thompson pointed to the “Begin Again” initiative, which is designed to clear up old warrants and help those who committed minor offenses in the past start anew.
“We already have an issue of mass incarceration in this country,” he argued. “We can’t criminalize a whole generation of people.”
And the door is not being closed on those previously convicted of crimes.
Thompson said that there were re-entry, training and employment opportunities his office offered that were designed to avoid recidivism.

Thompson also spoke about the recent exoneration of 13 prisoners in the borough – many of whom had spent decades behind bars for crimes they had not committed. The office’s 13-member Conviction Exoneration Unit has been reviewing cases tied to the tainted work of now-retired New York Police Department Detective Louis Scarcella.
“There is not one answer as to why these people were wrongfully convicted,” said Thompson, citing the case of a man who, after 25 years of incarceration for murder, was proven innocent.
The DA insisted that the work of his office needed to be far-ranging in order to accomplish the first tenet of its mission.
“The main duty of a prosecutor is to do justice,” he said.
For more on the CCEM’s “Newsmaker 2015” series, please visit www.ccem.journalism.cuny.edu.
Una plática con Thompson
Historia y fotos por Mónica Barnkow
Hace un año, la oficina del fiscal del distrito de Brooklyn anunció que no buscaría arrestos por drogas de bajo nivel.
Específicamente: no procesaría a las personas arrestadas por, presuntamente, tener menos de 25 gramos de marihuana.

Si bien los otros cuatro abogados de los distritos de la ciudad también permiten que los cargos contra presuntos delincuentes sean desestimados, los acuerdos con la fiscalía por lo general se producen para los delincuentes de primera vez que se mantienen fuera de problemas por un corto tiempo. Para eso se requiere al menos una experiencia en la corte y el proceso puede llevar meses.
Por el contrario, en Brooklyn, las desestimaciones se realizan ya sea, mientras los presuntos delincuentes siguen en custodia policial o antes de la fecha de corte.
El pasado jueves 9 de julio el fiscal de Brooklyn discutió esta política, y otras iniciadas bajo su gestión, en la Escuela de Periodismo de CUNY.
Su visita, organizada conjuntamente por el Centro para la Comunidad y los Medios Étnicos (CCEM por sus siglas en inglés) en la Escuela de Posgrado de Periodismo de CUNY y la oficina del fiscal del distrito de Brooklyn, fue la segunda entrega de “Newsmakers 2015”, una serie de mesas redondas con miembros de CCEM y funcionarios electos, actores y líderes, financiadas por la Fundación Revson.
En 2013 Thompson derrotó al antiguo titular Charles Hynes, quien brindó servicio durante 23 años.
Thompson, quien es el primer fiscal de distrito afroamericano del condado, ofreció un panorama general de su trabajo hasta la fecha como fiscal principal, destacó las próximas prioridades y habló del clima nacional sobre la reforma a la justicia penal y la vigilancia policial.

El debate fue moderado por el veterano periodista y anfitrión de Inside City Hall de NY1, Errol Louis, junto con los periodistas Aleksandra Slabisz, de Nowy Dziennik, y David Mark Greaves, de Our Time Press.
En sus palabras Thompson dijo que el enfoque de la oficina del fiscal del distrito es, sobre todo, el mantener la seguridad pública.
“La principal prioridad es prevenir el delito”, señaló Thompson, cuya oficina es la tercera mayor del país, después de Los Ángeles y Chicago.
Con este fin, la oficina ha formado una Unidad de Fraude de Bienes Raíces para procesar penalmente a los propietarios que incurran en prácticas engañosas o fraudulentas, acoso inquilino o desalojos ilegales.
“Ya no vamos a dejar que estas cuestiones entre propietarios/inquilino permanezcan en la corte de vivienda”, dijo, e indicó que las quejas de los inquilinos contra los propietarios han aumentado en su condado.
Thompson se refirió específicamente a un caso en el que dos propietarios (que también eran hermanos), con el pretexto de hacer reparaciones de vivienda, destruyeron las unidades y dejaron los edificios inhabitables para los inquilinos.
Entre las víctimas, dijo, había madres con niños pequeños.
“Quiero asegurarme de que nuestro sistema de justicia penal sea justo para todos nosotros”, explicó Thompson.

Citó el trabajo de la Unidad de Fraudes contra Inmigrantes de la oficina en la prevención y persecución de delitos como estafas de tarjetas verdes y robo de salarios. La oficina tiene foros informativos directamente con los residentes, a una reciente reunión en Crown Heights asistieron más de 200 personas.
“Tenemos que hacer más para proteger a las comunidades de inmigrantes”, dijo Thompson, advirtiendo contra aquellos que se hacen pasar por abogados, expertos y empleadores (a veces conocidos como “notarios”) y que se aprovechan de los indocumentados.
“A menudo estos crímenes se cometen en el lugar de trabajo”, remarcó.
Thompson habló sobre la iniciativa “Begin Again”, que está diseñada para aclarar viejas órdenes judiciales y ayudar a aquellos que cometieron delitos menores en el pasado a iniciar de nuevo.
“Ya tenemos un problema de encarcelamiento masivo en este país”, argumentó. “No podemos criminalizar a toda una generación de personas”.
Y la puerta no se cierra a los anteriormente condenados por delitos.
Thompson dijo que su oficina ofreció re-ingresos, capacitación y oportunidades de empleo, diseñadas para evitar la reincidencia.

Thompson también se refirió a la reciente exoneración de 13 presos en el condado, muchos de los cuales habían pasado décadas tras las rejas por delitos que no cometieron. Los 13 miembros de la Unidad de Exoneración de Condenas han estado revisando casos vinculados a la labor corrupta del ahora detective retirado del Departamento de Policía de Nueva York, Louis Scarcella.
“No hay una sola respuesta de por qué estas personas fueron condenadas injustamente”, dijo Thompson, citando el caso de un hombre que, después de 25 años de prisión por asesinato, demostró su inocencia.
El fiscal insistió en que el trabajo de su oficina necesitaba ser de largo alcance con el fin de lograr el mayor principio de su misión.
“El principal deber de un fiscal es hacer justicia”, dijo.
Para más sobre la serie “Newsmaker 2015” de CCEM, por favor visite www.ccem.journalism.cuny.edu.